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Estoy profundamente agradecida de coincidir contigo, Kaia. Desde aquellos primeros escritos que me resonaban tanto, siempre encuentro en tus palabras la sabiduría que hace clic en mí y despierta un entendimiento más consciente.
Siento una afinidad muy fuerte con lo que compartes. Con los años has sido parte importante de mi reconocimiento y de mi crecimiento interior. Agradezco cada consulta, taller y ayuno que he tomado contigo, pero algo muy especial fue la Maestría del Pensamiento: darme cuenta de que ahí parte todo, poder verlo, sentirlo y transformarlo en un instante.
Elegir mis pensamientos me ha llevado a vivirme desde la armonía y la calma. Desde ahí puedo sentir y escuchar mi Ser, esos pensamientos divinos, y llegar a un entendimiento mayor.
Gracias por todo lo que me has enseñado y por todo lo que seguiré aprendiendo. Gracias, gracias, gracias.
Te amo, Kaia. Eres una persona muy importante en mi vida y en mi crecimiento. Te agradezco con todo mi corazón y con todo mi ser.💚

Dalila Sánchez, México

Estoy muy agradecido por haberte encontrado, hermana. Recomiendo ampliamente el taller y cualquier atención personalizada con Kaïa.
En el taller algo dentro de mí resonó profundamente: fue una experiencia que me dio luz y una nueva visión sobre mí y el mundo. Aprendí que lo básico y esencial es vital; comprendí la importancia de los pensamientos y los efectos que estos causan en nosotros. Elegir qué pensar me ha mostrado que, pase lo que pase, los pensamientos son solo eso: un pensamiento bonito causa sentimientos bonitos, exista o no lo que pensamos.
También cambió totalmente mi concepción sobre las “enfermedades”. Antes las asociaba con algo negativo; intuía que tenían relación con situaciones personales no atendidas, pero no entendía la diferencia entre una cuestión emocional y un choque biológico ni cómo funcionaban. Hoy sé que no todos los síntomas tienen que ver con un choque biológico: existen malos hábitos y sustancias cotidianas que nos intoxican y afectan orgánicamente.
Ahora veo mi cuerpo y mi biología como un aliado, algo positivo que me indica cuándo hay una situación que atender y resolver. Al resolver un conflicto rápidamente, la fase de reparación también lo es, y esto me permite crecer y seguir evolucionando.
En cuanto a terapia y otras atenciones personalizadas, en su momento pensé en acudir con un psicólogo con mi pareja, pero inmediatamente vino a mi mente Kaïa. ¿Quién mejor para ayudarme que alguien cuya sabiduría y conocimientos rozan lo divino? Mi situación personal fue atendida con amor y comprensión, y ahora estoy mucho mejor y más feliz.
Muchas gracias, hermana del alma.

Jonathan Medina, México

Fue un proceso de 55 días muy bien guiado por Kaïa. Ella transmite luz; es como si encendiera una lámpara en el camino. En todo este tiempo me di cuenta de que mis relaciones familiares estaban siendo guiadas por pensamientos provenientes de la matrix artificial (ego). Darme cuenta de ello me ayudó a desprenderme de todo lo que estaba limitando mi bienestar.
Aún conservo mi cuaderno con toda la escritura diaria de este proceso. Hoy, al leerlo, es maravilloso ver que nada de lo que está escrito ahí me identifica. Anclé un nuevo proceso en mi vida al reencontrarme con ese fractal de la Fuente Divina que soy.
Kaïa, infinitas gracias.

Kaifeng Chang, Perú